viernes, 26 de septiembre de 2014

Balance de Blancos

Ajustar el balance de blancos significa básicamente asegurarse de que una parte de la fotografía que se supone que va a ser de un color neutral, realmente contiene igual cantidad de rojo, verde y azul. Lo llamamos balance de blancos, pero trabaja igual de bien con las partes gris claro de la escena, aunque, en términos generales, cuanto más claro el color, mejor. Si las partes grises de la fotografía son de hecho gris suavizado quiere decir que todos los otros colores de la escena serán suavizados de forma natural.

En las cámaras más modernas tenemos una configuración de AWB (balance de blancos automático), varias temperaturas de color predeterminadas, como 'luz día', 'tungsteno' y 'flash' y, en las mejores cámaras, una configuración personalizada.

AWB (balance de blancos automático) es la configuración predeterminada y la que deberías usar la mayor parte del tiempo. Luz día, sombra, nubes, flash y tungsteno son todos configuraciones establecidas que puedes usar bajo las condiciones de luz apropiadas.

Básicamente, son como los viejos filtros que los usuarios de películas enrollarían a las lentes para compensar las diferentes temperaturas del color. La ventaja de usar estas configuraciones predeterminadas, en contraposición al AWB, es que la predominancia de un color en la escena no provocara una lectura errónea de la cámara.

La configuración 'fluorescente' es ligeramente diferente ya que no es parte de la escala de la temperatura del color. Los tubos fluorescentes es tan básicamente equilibrados para la luz del día en lo que concierne a la escala amarillo/ azul, pero tienden a dar demasiada luz verde (o no suficiente magenta). Hay muchos tipos distintos de tubos fluorescentes, lo que es decir mucho, y deberías probar cada situación, pero si estas trabajando en una oficina o fábrica, iluminada por luz fluorescente, esta configuración puede sacarte del problema.

No hay comentarios:

Publicar un comentario